martes, 3 de enero de 2017

No me creo lo de las bodas


Tengo como una santa religión, eso de revisar mi Facebook antes de levantarme de la cama todas las mañanas. Me encuentro con lo de siempre: las oraciones de quienes creen que Jesús habita en la red, las fotos de medio Malambo ‘enmaicenado’ –por aquello del 1 de enero-, y las infaltables frasecitas de motivación, que parecen escritas por un selecto grupo de mujeres, autodenominadas en nuestra sociedad como “bendecidas, afortunadas y prosperadas en el Señor”.
Pero entre tanta basura, me llama mucho la atención la cantidad de fotos que se suben a una red social como Facebook. Según un estudio realizado por Photoworld y publicado en el diario El Comercio de Perú, los 1,4 mil millones de usuarios del ‘Feis’ –como cariñosamente llamamos a la red de Markito Zuckerberg- comparten alrededor de 4.501 fotos por segundo. ¡Nojoda! Estaríamos hablando de 270.060 fotos por minutos, o sea, más de 16 millones de fotos por hora. ¡DEMASIAO ESPANTAJOPISMO EN LA VIDA!
Pero hay algo notorio de todo esto, de lo que hablaré bajo mi lengua viperina y es que de esas 16 millones de fotos montadas por hora, al menos un 40%, es decir unas 7 millones de imágenes son de bodas, casamientos, empeliculadas barras de esas. ¡Hey, que locura! Y no miento.
Al menos en mi pequeño círculo de “amigos” que sobrepasan las 1.000 personas en Facebook, a diario veo un álbum de boda. Y los he visto de todos los tamaños: grandes, chiquitos, opulentos, chichipatos, con el mega sacerdote, en la mega iglesia, o en la oficina más triste de una notaría. En fin, los he visto todos y de todas las formas; lo único similar son los gestos de quienes se casan, porque todos se ven felices.
Entonces, me pregunto: ¿sé es feliz casándose? ¿Por eso todo el mundo se casa? #EnBuscaDeLaFelicidad a lo Will Smith y su pelaito. 
Le preguntaba a una de mis mejores amigas del colegio -que me sorprendió con la noticia de que se casaba- ¿niña y eso de casarte, por qué? Mi pregunta surgió luego de conocerle más o menos media docena de novios desde la pubertad hasta “la víctima” actual.
Mi amiga me dijo –De pronto llegó este queriendo bailar conmigo, y no sabe bailar y tampoco le gusta bailar, pero lo hace porque es conmigo con quien quiere bailar y nada más.
Me desarmó con su valiente discurso, la mujer del demonio esta. Entonces entendí que la ‘ruchera’ por casarse viene del amor. Pero no, me niego a esa conclusión y sigo con mis dudas… Dudas que iré solucionando mientras organizo mi propia boda. La boda de Chocoro.

6 comentarios:

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  2. Respuestas
    1. Hola Osbe DF, pronto, más pronto de lo que crees daré señas de lo que será la Boda de Chocoro.

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  3. Muy interesante! ;) felicidades por tu boda.

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  4. Más historias y personas como ella, te pedimos Señor 🙌

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